Imaginemos una vasija donde se deposite agua todos los días. Como es habitual se llena el recipiente, se transporta y luego se consume el agua que esta dentro de ahí. Siendo un proceso necesario para el ser humano para poder subsistir. La vasija es un objeto que deposita líquido para las distintas necesidades del ser humano.
El pensador Tales de Mileto (624 a.C- 546 a.C), fue un filosofo de la época presocrática. Siendo un importante personaje dentro de la historia de la filosofía occidental y considerado como el fundador de la Escuela de Mileto. Dentro de la tradición se dice que él, había establecido que el agua «es el principio de todas las cosas» siendo el «arjé».
Este axioma, sigue vigente hoy en día, pues de igual manera como Tales de Mileto trato de explicar el mundo y sus principios desde la racionalidad, también hoy en día es necesario reconsiderar ese repensar del pensamiento filosófico por las siguientes razones, para dilucidar la verdad de las cosas e interpretaciones hoy más que nunca.
Ante este consumo habitual en el pleno contexto del Siglo XXI, el agua siendo sinónimo de pensamiento es necesario depositarlo, consumirlo y volverlo a llenar; pues se ha hecho cada días más necesario dilucidar la información que cada uno de nosotros consumimos e interpretamos; ¿será buena o mala el tipo de agua que consumimos y bajo que fuentes la estamos bebiendo?
Tales de Mileto marco un antes y después en el contexto de la filosofía clásica, ya que heredo parte del cuestionamiento racional de la mitología griega antigua -dándole una explicación racional de la realidad- por medio de un discurso racional y fuera del mito religioso de los dioses. La presente analogía viene al caso porque es entendible que el agua es un bien vital para poder sobrevivir, por otro lado se puede reconceptualizar que el pensamiento es algo gratuito y es necesario al igual que el agua que Tales de Mileto trato de explicar como primer principio; pues sin el agua el ser humano no podría vivir, de igual manera sin el pensamiento ni la selección rigurosa de la información no se podría vivir.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario